Este fenómeno es conocido desde hace varios siglos. El violinista italiano Giuseppe Tartini (1692-1770) hablaba del terzo suono o tercer sonido que podía generarse a partir de 2 sonidos con el efecto práctico de ayudar en la afinación. Una tercera mayor está perfectamente afinada si genera una nota dos octavas más baja que la nota grave. Cualquier variación en la afinación de la nota superior se reflejará en la frecuencia de este tercer sonido:
Los constructores de órganos aprovechan este fenómeno para generar notas graves sin la necesidad de construir inmensos tubos y a la vez reducir el número de tubos necesarios. Dos tubos afinados a una quinta justa, generan un sonido una octava más baja que la del tubo más grave.
El que nuestro sistema auditivo sea capaz de recrear los armónicos graves a partir de los armónicos más agudos, explica porque podemos escuchar música en equipos de sonido con limitaciones para reproducir sonidos graves.
Para terminar, experimentemos con el efecto Tartini. Recomendamos el uso de audífonos. ¡Ajuste cuidadosamente el volumen para que no sea demasiado fuerte!
El sol (G4) con que comenzamos está a una quinta justa de do (C4) y está afinado de acuerdo al tamaño de la quinta de la serie armónica: 260 x 1.5 = 390. La quinta del sistema de temperamento igual - de uso común en nuestros días - tiene 2 cents menos que la quinta acústica.
Si le interesa saber porqué en el sistema de temperamento igual las quintas son más pequeñas, cliquee aquí para leer sobre la historia de los temperamentos musicales.
© 2017 José Rodríguez Alvira. Publicado por teoria.com