Tomemos como ejemplo el minueto de Bach que usamos para presentar la forma binaria. Podemos dividir la sección A de la pieza en dos frases (presentadas con colores diferentes):
Generalmente el final de una frase es señalado por una cadencia. En este caso la primera frase termina con una cadencia a la dominante (V) y la segunda con una cadencia auténtica perfecta.